sábado, 31 de diciembre de 2011

Noche Vieja

Yo en Nochevieja me siento... me siento... no sé, me siento como un toro, ¿no? Cuando llega la fiesta miro alrededor y me da la sensación de que todo el mundo se lo está pasando bien, menos yo.


El estrés comienza con la cena. Aquello parece una prueba del Gran Prix:


Tienes que llevar calzoncillos rojos, tener algo de oro para meterlo en la copa, preparar las doce uvas... y contarlas varias veces, porque, como son todas iguales, te equivocas:
Una, dos, tres, cuatro... una, dos, tres, cuatro, cinco, seis...Esta pocha ya la he contado... Una, dos... siete, ocho...


Joder, las doce menos veinte! ¡Chavalín, trae el Rotring, que las voy a numerar, como en el Bingo!


Y tu madre:
Queréis venir, que se enfrían las gambas? Que esa es otra: te tienes que comer todo lo que está en la mesa...¡antes de las doce! que, con las prisas, más que pelar gambas, parece que estás desactivando una bomba.


¡Coño, las doce menos diez! -¡Mamá, no me da tiempo: hazme un sándwich con el cochinillo,
que ya está terminando Cruz y Raya!


Y no eres el único que está agobiado, ¿eh? No hay más que ver la tele.



Allí están Ana Obregón y Ramón García, explicando a toda España como funciona un reloj.
Acojonados por si se equivocan:
- Cuando la aguja pequeña esté en las doce y la grande también... serán las doce.


¡Coño, como todas las noches! Y entonces bajará la bola y... luego vienen los cuartos, ¡no vayan a empezar a comerse las uvas, ¿eh?


Vamos a ver: ¿por qué nos explican mil veces que no nos comamos las uvas en los cuartos y nadie nos explica por qué coño tiene que bajar una bola? ¿Qué clase de reloj es ése?


Cuando por fin llegan las doce, en toda España se oye lo mismo: Cla, cla, cla, cla... Eso es la bola: cla, cla, cla... Din


-¡GLUP!-don...-¡Ah no, que son los cuartos!
-Din-don...
-¡Escupid que son los cuartos!
-Din-don...
-Pfbbbbbbbb...-¿qué son qué?
-Din-don...
-Los cuartos...
-Ton...
-¡Ahora, ahora!-Ton...
-¡Una!
-¡Que no, que vamos por la segunda!
-Ton...
-Pues me meto dos...
-Ton...
-Seis...-¿Cómo que seis?
-Ton...
-A mí ya no me caben más, ¿eh?
-Ton...
-¡Eh!, ¡deja mis uvas, cabrón!
-Ton...
-¡Es que se me ha caído una al suelo!
-Ton...
-Bgrfds...
-Ton...
-Bggggdffffff...
-Ton...
-A mí ya no me quedan...
-Ton...- ¡Pues a mí me sobran cuatro!
-Ton... -mamá el abuelo está morado....


Y cuando acaban, toda la familia con la boca llena de babas, a darse besos:
-Fffffelifsz año, eeeeeeeeeh, felifzcidadef, grfdddfd...

Y suena el teléfono: ¡riiiiiiiiiing!
-¡Pero coño! ¿Ya están llamando? ¿No se pueden esperar?-Pues a mí todavía me sobran dos...-¡Champán, que alguien venga el Champán!


Pero, bueno, vamos a ver ¿a vosotros os parece lógico empezar el año así?
¡Qué estrés, de verdad! Pero como es Nochevieja...tienes la obligación de divertirte.


Así que después te vas a un fiestorro a un sitio en el que, si caben mil personas, el dueño ha decidido meter a cinco mil doscientas. ¡Muy bien! ¡Cuatro mil doscientas más de las que caben! ¡Quédate en la calle si te apetece, con la pelona que está cayendo! Porque en Nochevieja siempre hace un frío que pela..


Así que entras. Lo bueno que tiene ir a un sitio así es que te puede pasar cualquier cosa.
A mí el año pasado me ocurrió de todo.Yo estaba tan tranquilo, tomándome mi cubatita de garrafón, cuando de repente un tío me cogió por detrás y me dijo:


¡¡¡COOOOOOOOONGAAAAA!!!!!Y, claro, que vas a hacer, pues te pones a bailar... ¡Eso te lo hace un tío en el autobús y le partes la cara!
¡Pero como es Nochevieja...! ¡Pues hala!
Y de repente te das la vuelta y llevas cien personas enganchadas a tu culo.


¡A ver como escapas de ésta! Porque una conga es como una secta: entrar es muy fácil pero salir es muy jodido. Porque en el garito hay como doce congas girando a toda pastilla...Bueno, pues iba yo conduciendo mi conga... por mi derecha, cuando, de pronto, me veo venir en dirección contraria una conga suicida acojonante conducida por un gordo con casco de vikingo.


Yo le iba a hacer ráfagas, pero como las congas no llevan ni luces ni nada... pues, para evitar la colisión, di un giro brusco a la derecha... ¡Y me tragué entera una columna de espejitos!
¡Siniestro total! Doce heridos leves y una columna de espejitos destrozada.


Y yo, con una ceja abierta tirado en el suelo pensaba: Joder, como me hagan soplar ahora,la hemos cagao.


Y en ésas, me desmayé. Al despertar estaba en la sala de urgencias, rodeado por todos los de mi conga.


Algunos todavía no se habían desenganchado; habían venido corriendo detrás de la ambulancia.
Bueno, las urgencias en Nochevieja, hay que vivirlas.Si en la sala caben cincuenta personas, el dueño ha metido a ciento cincuenta...


Como el de la discoteca. Y como allí también es Nochevieja, el camillero lleva un gorrito de moro, la enfermera un collar de hawaiana y el que te cose la ceja unos dientes de Drácula, ¡que te da una confianza... !


El tío te dice:
-¿Qué ha sido? ¿Con una moto?
-No, con una conga.
-¡Ay!, si es que van como locos con las congas...


Cuando salí de allí me quería ir a mi casa, pero como era Nocheviejaceja grapada en un bareto...


-Oiga, póngame un chocolate con churros a ese módico precio de 4 Euros de na.
-Pues sólo nos queda Nesquick y algunos dónuses... Es que los últimos churros se los han tomado los de una conga, ¡traían un cachondeo...! Había un gordo que llevaba un casco de vikingo... ¡No le digo más!


Y es lo que yo le digo a los clientes: si no disfrutas en Nochevieja, ¿cuándo vas a disfrutar?

jueves, 29 de diciembre de 2011

Un beso bajo el muérdago

De tantas tradiciones que se dan en torno a la navidad, esta es una de las más pícaras. Siempre pensé que era una invención de alguna familia antigua para permitir los besos en una época en que era algo poco pudoroso o hasta mal visto.
Sin embargo la tradición tiene su base. Todo comenzó con los nórdicos y celtas, que consagraron el muérdago al Dios de la Primavera “Baldur”; desde allí se convirtió en el adorno por excelencia en las fiestas del Solsticio de Invierno. Por su parte los druidas lo recogían con una hoz de oro, y luego lo quemaban para los dioses, con la certeza de que este acto les protegería de distintos males.
Sin embargo esto de besarse bajo el muérdago es tradición atribuida a los griegos que comenzaron a hacerlo en sus festividades saturnales y luego en los ritos de matrimonio más primitivos. Todo ello porque se le atribuían propiedades relacionadas con la fertilidad, y porque entonces se creía que el estiércol del cual procedía el muérdago tenía el don de la vida.
Esta creencia se fue afianzando, y luego los ingleses del siglo XVIII comenzaron a colgar bolas de muérdago en sus casas durante el invierno y se decía que ninguna chica bajo el muérdago debía rechazar un beso, y que este  beso daría pie al matrimonio y este sería una unión feliz. Pero si la chica no corría con suerte y nadie la besaba (Imagino a las chicas largos ratos bajo el muérdago y que nadie quisiera besarla, pobre) entonces no sería en ese año que se casaría y tendría que esperar hasta el siguiente año.
Luego todo se fue complicando (Porque a la humanidad no le gusta lo simple…) y si el muérdago que estaba en la puerta no se quemaba tras la decimosegunda noche desde la navidad, no sólo sería de mala suerte para la familia dueña de la casa, sino que ninguno de los que lograron besarse bajo el muérdago llegarían a casarse como esperaban.
 
Aún hoy día se mantiene esa tradición en los países nórdicos, más por la picardía de besarse que con la certeza de que esto les dé larga vida juntos, pero sigue siendo una romántica tradición para los que creen en las promesas de amor verdadero.

domingo, 25 de diciembre de 2011

El Árbol de Navidad

Hace ya muchos años, en el siglo VIII, había un monje benedictino que amaba al Señor por encima de todas las cosas. Su nombre era Winfrid, y su amor por Jesucristo era tan grande que deseaba que todo el mundo pudiese disfrutar de Él.
Existía por aquella época toda una zona del centro y norte de Europa que no creían en Jesucristo y se habían entregado a las prácticas de otras creencias religiosas. Aquella extensión de terreno era conocida como la Germania.
Winfrid, empujado por su ardoroso deseo de llevar al Señor a todos los confines de la tierra, emprendió su marcha hasta lo que hoy conocemos como Alemania.  Allí estuvo meses y meses intentando evangelizar pero todo aquello que intentaba resultaba inútil. Nadie le hacía caso, pero él no desesperaba y sus deseos de transmitir la fe en vez de disminuir, iban creciendo.
Atento siempre a todo lo que le rodeaba, Winfrid descubrió un detalle en las gentes de aquellas tierras que le abrió el camino de la sabiduría y el entendimiento. Los habitantes de aquel lugar tenían por costumbre acudir a un bosque cercano a realizar oraciones a sus dioses. El Espíritu Santo iluminó a Winfrid y le mostró el nuevo camino evangelizador que debía tomar.
Reunió a los aldeanos en el bosque donde solían rezar y les dijo: “Vuestros dioses son como vuestros árboles (encinas, hayas, etc.) que caducan. Hoy están con vosotros pero mañana mueren y ya no os acompañan. No son eternos, al igual que aquellos a los que llamáis vuestros dioses. Yo voy a plantar aquí este abeto que recuerda a mi Dios. Jesucristo es como este árbol que no caduca, que no muere. Una vez que lo plantas, se queda contigo para siempre. Así es Dios verdadero, el que no nos abandona nunca.”
A este lúcido discurso añadió: “Y vamos a poner estas velas (nuestras actuales luces) porque sólo Jesucristo es el que nos puede dar luz, el que puede alumbrar nuestro camino.”
Todavía no había terminado: “Y también le vamos a añadir estas manzanas (nuestras actuales bolas de colores) porque Cristo crucificado carga con nuestros pecados, carga con los pecados de los hombres.
Y aquel abeto, con sus velas y manzanas, se quedó en ese bosque para siempre. Todos aquellos que pasaban por delante no podían olvidar las palabras del benedictino: “Jesucristo está siempre contigo, te ilumina, te salva de tus pecados, te ama con locura” Así, muchos, tras esa contemplación, se convirtieron al Señor y entraron a formar parte de los hijos de la Iglesia.
Aquel monje consiguió ser instrumento de Dios, vehículo de salvación para los hombres. Hoy nosotros le conocemos con el nombre de San Bonifacio.
 

jueves, 15 de diciembre de 2011

La Corona de Adviento

El Adviento, es un tiempo de preparación, nos preparamos para la llegada del niño Jesús, del Salvador, el Mesías, el Señor. Debemos estar preparados para recibirle con alegría y entusiasmo y por eso debemos estar en paz con Dios y sobre todo con nosotros mismos. Por eso, ya que este domingo entramos en la cuarta semana de Adviento, voy a contar cual es el origen de la Corona de Adviento.

Origen: La Corono de Adviento tiene su origen en una tradición pagana europea que consistía en prender velas durante el invierno para representar el fuego del dios Sol, para que regresara con su luz y calor durante el invierno. Los primeros misioneros aprovecharon está tradición para evangelizar a las personas. Partían de sus costumbres para enseñarles la fe católica. La corona está formada por una gran variedad de símbolos.


La forma circular: El círculo no tiene principio ni fin. Es señal de amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin, y también de nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe terminar.


Las ramas verdes: Verde es el color de esperanza y vida, y Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas. El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.





Las cuatro velas: Nos hace pensar en la oscuridad provocada por el pecado que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo como las velas la corona. Así como la tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, los siglos se fueron iluminando con la cada vez mas cercana llegada de Cristo a nuestro mundo.
Son cuatro velas las que se ponen en la corona y se prenden de una en una, durante los cuatro domingos del Adviento al hacer la oración en familia.


Las manzanas rojas que adornan la corona: Representan los frutos del jardín del Edén con Adán y Eva que se trajeron el pecado al mundo pero recibieron también la promesa del Salvador universal. 


El listón rojo: Representa nuestro amor a Dios y el amor de Dios que nos envuelve.


  


jueves, 24 de noviembre de 2011

Happy Thanksgiving (El origen de "Acción de gracias")

La celebración del día de Acción de Gracias tiene sus orígenes en la fundación del segundo enclave británico permanente en América. Los primeros pobladores de dicho enclave fueron los Pilgrims (Peregrinos) un grupo de religiosos separatistas ingleses que vinieron al nuevo mundo en busca de libertad religiosa. Después de un difícil viaje a bordo del Mayflower, los “Pilgrims” llegaron a Plymouth, Massachussets, un día de diciembre de 1620.

Los primeros meses fueron muy pesados, el invierno, el hambre y las enfermedades habían desaparecido a casi la mitad de la población de la colonia. Durante la primavera con la ayuda de los indios Wampanoag los “Pilgrims” comenzaron a planear cosechas que les ayudarían a sobrevivir el año siguiente.


En noviembre de 1623, después de recolectar la cosecha, el gobernador de la colonia de peregrinos “Plymonth Plantation” en Plymonth, Massachusetts, declaró: “Todos ustedes, peregrinos, con sus esposas e hijos, congréguense en la casa comunal, en la colina… para escuchar al pastor, y dar gracias a Dios todo poderoso por todas sus bendiciones.”

Durante los tres días que duró la celebración comieron pavo, maíz, calabaza y carne de ciervo. Así fue el primer día de Acción de Gracias.


En los años siguientes, el congreso de los Estados Unidos proclamó en varias ocasiones el día de acción de gracias al todo poderoso. Finalmente, el 1° de noviembre de 1777 fue oficialmente declarado como día feriado.



De nuevo, el 1º de enero de 1795, el primer presidente, George Washington, escribió su famosa proclamación de acción de gracias, en la cual él dice que es… “nuestro deber como personas con reverente devoción y agradecimiento, reconocer nuestras obligaciones al Dios todopoderoso, e implorarle que nos siga prosperando y confirmado las muchas bendiciones que de El experimentamos…”


El primer día nacional de Acción de Gracias fue celebrado por el presidente Lincoln en 1863 y proclamó que se celebraría todos los años de ahí en adelante. Durante 1941 el presidente Roosevelt y el congreso declararon oficialmente el cuarto jueves de noviembre como el día de Acción de Gracias.


Es muy famoso el "Desfile de Acción de Gracias" que tiene lugar en los E.E.U.U.  y que da paso a las fiestas de Navidad

sábado, 12 de noviembre de 2011

Lo que realmente hacíamos en clase

1. NUNCA nos copiamos... solo consultamos nuestras dudas


2. NO pintamos los pupitres... solo los decoramos


3. NO insultamos a los profesores... solo les recordamos lo que son


4. NO nos distraemos... solo estudiamos


las moscas


5.NO leemos revistas solo nos informamos mas


6. No escribimos notitas o cartas... estudiamos otro medio de comunicación


7.No dormimos en clase... reflexionamos


8.NO hablamos... intercambiamos expresiones


9.No masticamos chicle... estimulamos nuestros músculos


10.No suspendemos... nos suspenden


11. No tiramos papeles... estudiamos la ley de la gravedad


12. No nos reímos... somos felices

jueves, 3 de noviembre de 2011

Qué solos se quedan los muertos

Cerraron sus ojos 
Que aún tenía abiertos, 
Taparon su cara 
Con un blanco lienzo, 
Y unos sollozando, 
Otros en silencio, 
De la triste alcoba 
Todos se salieron. 

La luz, que en un vaso 
Ardía en el suelo, 
Al muro arrojaba 
La sombra del lecho, 
Y entre aquella sombra 
Veíase a intérvalos 
Dibujarse rígida 
La forma del cuerpo. 
 
Despertaba el día, 
Y a su albor primero, 
Con sus mil ruidos 
Despertaba el pueblo. 
Ante aquel contraste 
De vida y misterio, 
De luz y tinieblas, 
Yo pensé un momento: 
“¡Dios mío, qué solos 
Se quedan los muertos!” 
  
De la casa, en hombros, 
Lleváronla al templo, 
Y en una capilla 
Dejaron el féretro. 
Allí rodearon 
Sus pálidos restos 
De amarillas velas 
Y de paños negros. 
  
Al dar de las ánimas 
El toque postrero, 
Acabó una vieja 
Sus últimos rezos, 
Cruzó la ancha nave, 
Las puertas gimieron 
Y el santo recinto 
Quedóse desierto. 
  
De un reloj se oía 
Compasado el péndulo 
Y de algunos cirios 
El chisporroteo. 
Tan medroso y triste, 
Tan oscuro y yerto 
Todo se encontraba 
Que pensé un momento: 
“¡Dios mío, qué solos 
Se quedan los muertos!” 
  
De la alta campana 
La lengua de hierro 
Le dio volteando 
Su adiós lastimero. 
El luto en las ropas, 
Amigos y deudos 
Cruzaron en fila, 
Formando el cortejo. 
  
Del último asilo, 
Oscuro y estrecho, 
Abrió la piqueta 
El nicho a un extremo; 
Allí la acostaron, 
Tapiáronla luego, 
Y con un saludo 
Despidióse el duelo. 
  
La piqueta al hombro 
El sepulturero, 
Cantando entre dientes, 
Se perdió a lo lejos. 
La noche se entraba, 
Reinaba el silencio,
Perdido en las sombras 
Medité un momento: 
“¡Dios mío, qué solos 
Se quedan los muertos!” 
  
En las largas noches 
Del helado invierno, 
Cuando las maderas 
Crujir hace el viento 
Y azota los vidrios 
El fuerte aguacero, 
De la pobre niña 
A solas me acuerdo. 
  
Allí cae la lluvia 
Con un son eterno; 
Allí la combate 
El soplo del cierzo. 
Del húmedo muro 
Tendida en el hueco, 
¡Acaso de frío 
Se hielan los huesos...! 

¿Vuelve el polvo al polvo? 
¿Vuela el alma al cielo? 
¿Todo es vil materia, 
Podredumbre y cieno? 
¡No sé; pero hay algo 
Que explicar no puedo, 
Que al par nos infunde 
Repugnancia y duelo, 
A dejar tan tristes, 
Tan solos los muertos.

viernes, 28 de octubre de 2011

Los Gatos Negros

El gato y la brujería


Si el gato era considerado símbolo de la divinidad entre los egipcios; los celtas, por el contrario, desarrollaron un miedo particular a este mítico animal, pues creían que los gatos negros era la forma felina en que algún poder demoníaco había transformado a una persona, es decir, los gatos eran personas malditas.En la leyenda, la diosa céltica Wicca se convierte en un gato negro para cometer el incesto con su hermano, Lucifer





Se dice que el cuerpo del gato negro no es más que el disfraz que utilizan las mismas brujas para pasearse tranquilamente por la ciudad, para pasar desapercibidas. Por eso una de las tradiciones de Halloween advierte que si un gato negro se te cruza por delante en esta noche la mala suerte caerá sin remedio sobre tu cabeza. ¿Sin remedio? Noooo, hay un antídoto: cuando te pase eso da inmediatamente siete pasos hacia atrás y ¡maldición conjurada!



Popularmente a las brujas se las asocia con ciertas imágenes.
El típico sombrero negro, viejas y feas, con espantosas verrugas en la nariz, un gato negro de compañero, la infaltable escoba para volar, y un gran caldero humeante al fuego...
Pero no todas las historias sobre brujas las pintan tan horripilantes, algunas hablan de mujeres muy hermosas, con ojos seductores, y que tienen la capacidad mágica de transformarse en cualquier otra persona o animal, y con sus encantos logran sacar ventaja de otros y someterlos a su poder.
En la tradición Celta se relata que las brujas consideraban como sus mejores amigos a los gatos erizos, en especial los de color negro. La Bruja utilizaba a su gato, como su sirviente mensajero o secretario y también se decía que era alguna persona transformada por un conjuro, doblegando su voluntad.
Durante la Edad Media nace la falsa creencia de considerar al gato negro como de mal agüero, por pensar que cumplían mandatos de las brujas y esto dio lugar a que los fanáticos sacrificaran a miles de estas bellas e inocentes criaturas. 



Supersticiones 


La dualidad del gato como símbolo de la divinidad y de la representación demoníaca, dio lugar a que en las supersticiones relacionadas con él se le considere representante de la mala o la buena suerte, según la circunstancia o lugar en que naciesen.
* Se dice que un gato negro es realmente un vaticinio nefasto, si se cruza en el camino de una persona de derecha a izquierda. También que pierde este carácter de maldad si tiene un lunar blanco en alguna parte del cuerpo.
* Existen pueblos en que el encuentro de un gato negro camino de la iglesia el día de la boda da buena suerte, mientras que en otros es símbolo de desgracias conyugales.
* Se cree que el gato negro trae buena suerte en los juegos de azar, sobre todo si se toca alguno antes de que empiece el juego.
* También se cree que tener un gato negro en casa es símbolo de buena fortuna.
* La gente del mar suele estar muy atenta al comportamiento del gato a bordo. Es tradición popular que si el gato corre, juega o salta pronostica tormentas y galernas
* En España se dice que una persona afortunada tiene siete vidas como los gatos.
* Soñar con un gato es de mal agüero.
* En algunas regiones del sur de Estados Unidos todavía se piensa que, si se permite a un gato acercarse a un cadáver humano, una horrible desgracia caerá sobre la familia del difunto.
* En Sicilia, un gato negro representa el mal de ojo.
* En Kentucky existe la creencia de que la visita de un gato negro a una casa es señal de buena suerte, excepto si decide quedarse, en cuyo caso significaría infortunio.
* En la Gran Bretaña del siglo XIX, el que un gato negro se paseara por delante de unos novios a punto de casarse representaba felicidad y fecundidad para los contrayentes.
* Las mujeres de los marineros solían tener un gato negro en casa para asegurarse de que sus maridos volverían sanos y salvos.
Pero más allá de todas estas creencias, puedo decir con certeza que el gato una vez que te adopta como su amigo, será sin duda tu mejor y más fiel compañero, dándote muestras constantes de su inmenso cariño...


miércoles, 26 de octubre de 2011

Truco o Trato

El 31 de octubre al anochecer, Halloween entra en su apogeo. Una de las costumbres más arraigadas la noche de Halloween entre los niños y no tan niños es disfrazarse, cuanto más terrorífica y esperpénticamente mejor, y recorrer las calles al asalto de las casas del barrio. Las pandillas de niños van por la calle con sus calabazas, llaman a las puertas y cuando el inocente visitado abre la puerta, lanzan el grito unánime "¡truco o trato!" (trick or treat). La tradición exige que el inquilino de la casa ceda a este terrible chantaje, regalando a los niños todo tipo de dulces y golosinas de Halloween, haciendo, pues, trato (treat) con ellos. De no obrar de esta manera, el vecino moroso se expone a las temibles travesuras (tricks) de los chiquillos disfrazados de esqueletos, zombies, vampiros, momias o brujas.



Esta costumbre, trick or treat, debe su origen a la persecución de los protestantes contra los católicos en la Inglaterra de los siglos XVI y XVII.


Como consecuencia de estas persecuciones, el rey protestante James I y su Parlamento fueron víctimas de un intento de atentado pero el plan fue truncado cuando Guy Fawkes uno de los conspiradores, posteriormente ejecutado, habló bajo la presión de los verdugos y traicionó a sus compañeros.


  
El hecho dio lugar a una fiesta de carácter burlesco, en que pandillas de luteranos que protegían su identidad bajo máscaras lúgubres, celebraban la fecha del descubrimiento de la traición visitando los hogares católicos y exigiendo a sus acobardados moradores cerveza y pasteles. La amenaza, se hizo popular muy pronto: "Trick or Treat". De esta manera el "Día de Guy Fawkes" llegó a América con los primeros colonos, se trasladó al 31 de octubre y se unió con la fiesta de Halloween.